No sólo los productos protectores de cultivos (PPC) sino también todas las demás sustancias químicas que se manejan en los cultivos de flores, deben considerarse como material químico peligroso.
Un material peligroso es aquel capaz de producir efectos adversos sobre la salud de las personas, su seguridad o la de la empresa y sobre el medio ambiente. Allí se incluyen todas las sustancias cancerígenas, tóxicas, irritantes, corrosivas, alergizantes, explosivas, radiactivas, etc.
Tomando en cuenta esta definición, se identifican en las fincas, productos como: materiales combustibles, fertilizantes (algunos de ellos son oxidantes), soluciones de Tiosulfato de Plata (STS) y PPC, entre otros.
Dentro de las etapas del proceso del cultivo de flores, se identifican algunas actividades críticas, que podrían generar una situación de emergencia, a saber:
1. Almacenamiento
2. Dosificación y pesaje
3. Transporte
4. Preparación y aplicación
Las emergencias que podrían presentarse más frecuentemente con motivo del manejo de sustancias químicas en general, son: Intoxicación, vertimiento accidental o derrame y un incendio. Sin embargo, de ellas la más frecuente y que genera mayores problemas ambientales, es el vertimiento o derrame.
1. ALMACENAMIENTO
Antes de comenzar a organizar los productos químicos dentro del almacén, deben tenerse en cuenta diferentes aspectos previos relativos a los productos y al lugar de almacenamiento. Dichos aspectos previos serán importantes tanto para la adecuada conservación de los productos que se almacenan como para el medio ambiente, la seguridad de las instalaciones y de quienes operan en ésta área.
En las fincas se han de separar claramente, los combustibles, de los PPC y estos, a su vez, de otros productos químicos como ácidos, hipoclorito, etc. Ningún producto químico deberá guardarse o almacenarse junto a otra clase de materiales como cartón, papel, plásticos, madera, etc.
Los PPC, deben quedar en un lugar aislado de otros materiales; es importante que esta área sea exclusiva, independiente y con recursos propios.
Toda área donde se almacenen o manejen sustancias químicas, debe ser de acceso restringido y el manejo debe quedar a cargo exclusivamente, de personal capacitado y calificado.
Para organizar adecuadamente los productos químicos, es necesario tener en cuenta la peligrosidad de las sustancias y también las posibles incompatibilidades que puedan presentarse entre ellas, ya que algunas pueden reaccionar violentamente al mezclarse o poner en peligro la seguridad de la empresa. Existen diversos sistemas para clasificar, rotular y separar los productos pero uno de los más estrictos es el IMO (creado por la Organización Marítima Internacional). A continuación se enuncian algunas generalidades importantes:
1.1 ETIQUETAS
Las etiquetas de los productos químicos deben estar siempre en buen estado, ser legibles; ellas contienen información necesaria sobre el manejo seguro y almacenamiento, símbolos de peligrosidad, indicaciones sobre riesgos y consejos de seguridad.
Asegúrese de que todos los productos químicos, posean una etiqueta con información mínima acerca de: Fabricante, Nombre del producto, concentración y/o pureza, peligrosidad y número de identificación AUN si lo tiene.
Algunas etiquetas poseen datos básicos sobre las medidas de emergencia; sin embargo, esto puede obviarse si se cuenta con las hojas de seguridad correspondientes. Para Colombia, todas las etiquetas deben venir escritas en idioma español; por tanto, no se deben recibir productos cuya etiqueta venga escrita en otro idioma o no posea traducción; de ser indispensable recibir productos etiquetados en otro idioma, la empresa determinará la manera de colocar una nueva etiqueta que cumpla con los requisitos.
1.2 ENVASES
La observación rutinaria del estado de los envases junto con sus etiquetas, ayuda a prevenir accidentes.
Los envases deben mantenerse en perfecto estado.
Los productos envasados en plástico deben trasvasarse al cabo de cinco años, porque el frasco puede presentar alteración, aunque lo más aconsejable es mantener un buen control de inventarios con el fin de no guardar los productos químicos por mucho tiempo.
Para transportar los frascos de un lugar a otro no se deben tomar del cuello, sino que éstos deben colocarse en una bandeja o recipiente de seguridad.
Se sugiere guardar producto suficiente para pocos días, de tal manera que se mantenga una alta rotación que permita conservar la calidad del producto y evitar accidentes.
Materiales:
En general, para pequeñas cantidades de producto, el vidrio transparente o de color ámbar, se prefiere por su alta resistencia al ataque de la mayoría de productos químicos, pero su fragilidad representa un riesgo. Las medidas de seguridad con este tipo de envases, deben enfocarse a protegerlos de la ruptura y por tanto, siempre deben colocarse en las partes más bajas.
Para una gran cantidad de sustancias, como los PPC, es más apropiado el recipiente plástico. Actualmente, la mayoría de los fabricantes o distribuidores suministran sus productos en envases plásticos y recomiendan mantenerlos en sus recipientes originales.
Otra clase de productos químicos como ácidos, fertilizantes, combustibles, etc., vienen en envases de materiales y formas diversas, según el estado físico (sólido o líquido) y también, según la cantidad y sus incompatibilidades. Así, muchos ácidos llegan a las fincas en canecas plásticas y los combustibles en recipientes metálicos.
1.3 SITIO DE ALMACENAMIENTO
El sitio escogido para almacenar los productos químicos debe llenar un mínimo de requisitos para que sea óptimo.
El área de almacenamiento y especialmente sus paredes deben ser secas e incombustibles, piso no absorbente, el sitio debe ser de acceso restringido, con aireación y luz natural pero protegido de la luz directa del sol.
La ventilación también puede ser forzosa, en cuyo caso, se tomará en cuenta que el aire circule hacia zonas desiertas de personal: como corredores, casinos, baños, zonas de recreación, etc. Adicionalmente, los sistemas de aireación del almacén de PPC, han de ser también independientes de otras áreas de almacenamiento.
En todo almacén se hace indispensable la señalización (cada área debe tener su nombre claramente identificado); debe ser obligatoria la utilización de los elementos de protección personal y elementos para la extinción de incendios (extintores, satélites y gabinetes o hidrantes), los cuales deben ser elegidos de acuerdo con las características de los productos que se almacenan, por ejemplo, no utilizar agua como medio para combatir el fuego de un producto que reaccione violentamente con ella.
Los lugares donde se almacenan o manejan productos químicos, deben contar idealmente, con una salida de emergencia (independiente de la puerta de acceso al área), un teléfono y un sistema de alarmas.
Igualmente, el área debe estar dotada de implementos básicos para atención de derrames, botiquín y ducha de emergencia y lavaojos.
Dentro del almacén de PPC, se encuentra la zona de dosificación y pesaje, la cual debe estar a su vez aislada o limitada a fin de controlar mejor la contaminación ambiental del almacén. En dicha sub-área, se debe contar con los siguientes elementos:
Cabina de extracción localizada.
Mesón firme y en un material tan liso como sea posible, de fácil limpieza.
Preferible iluminación natural.
Área para colocar los recipientes de dosificación.
Si es necesario el uso de balanza eléctrica o cualquier equipo que requiera electricidad, las instalaciones deben mantenerse en perfecto estado.
1.4 ESTANTERÍAS
Según el tamaño de los recipientes y el número de ellos, se instalará un sistema de almacenamiento en estantería, como por ejemplo, para los frascos que contienen PPC.
Se prefiere que la estantería esté elaborada de material no combustible ni generador de chispas; el plástico es un material que se carga con energía estática con gran facilidad. El estado físico de algunos PPC es originalmente sólido fino y esto contribuye a la generación y acumulación de cargas electrostáticas.
Así mismo, el diseño de la estantería debe tener en cuenta el aspecto ergonómico para evitar lesiones osteomusculares.
El estante debe levantarse lo más cerca posible del suelo, pero nunca directamente sobre él, en la parte inferior de cada compartimiento debe contar con una bandeja colectora cubierta con tapetes especiales o material inerte para absorber derrames; por otra parte, el estante debe mantenerse asegurado para evitar que se mueva y a cada entrepaño, instalarle una barra soporte o cadena para evitar que los frascos se deslicen hacia adelante.
El estante debe ser llenado de tal manera que los recipientes que contienen líquidos y son de mayor capacidad o son de vidrio vayan abajo, los frascos altos hacia atrás y los pequeños adelante. Los productos más peligrosos abajo y los más inofensivos arriba.
La cantidad de frascos colocados sobre cada entrepaño, no debe sobrepasar su capacidad de carga. El producto almacenado debe ser únicamente el necesario, no se recomienda tener grandes existencias de un producto.
Mantener la limpieza de la estantería es fundamental para un almacenamiento adecuado.
El almacenamiento de otros productos químicos líquidos como ácidos, hipoclorito, etc., que vienen en canecas u otros recipientes de características similares, se recomienda el uso de estibas especiales altamente resistentes a los productos químicos; estas estibas cuentan con espacios colectores para recuperar derrames y permiten cambiar fácilmente la ubicación de los recipientes dentro de la bodega. Si no se desea optar por esta alternativa, lograr las mismas condiciones de seguridad implica adaptar material absorbente y diques de contención alrededor de las estibas convencionales o construir un cárcamo.
Los productos sólidos que vienen en sacos o bultos, se pueden apilar sobre estibas convencionales.
Todas las sub-áreas de almacenamiento de productos químicos, se deben demarcar claramente con líneas amarillas que definan los corredores de circulación a lo largo de la bodega.
Así mismo, se han de demarcar las áreas donde se ubican extintores, botiquín, duchas u otros elementos de seguridad cuyo acceso no deba presentar obstáculos.
1.5 LA SEPARACIÓN Y ORGANIZACIÓN DE LOS PRODUCTOS
Esta labor de separar los productos y organizarlos adecuadamente dentro del almacén es fundamental para mantener el orden y la seguridad en todo sentido.
En el almacén de PPC, se recomienda separar los productos según sus categorías toxicológicas, destinar espacios perfectamente identificados para cada una de ellas, lo cual facilita en forma práctica la organización del almacén. Sin embargo, es indispensable tener en cuenta que la peligrosidad de los productos químicos no se limita a su toxicidad y pueden existir sustancias de la misma categoría toxicológica, pero incompatibles entre sí. Por tanto, una vez clasificados los productos según su categoría toxicológica, se debe verificar, consultando la hoja de seguridad de cada uno de ellos, si existen riesgos adicionales que los hagan incompatibles entre sí. En tal caso, será necesario reubicar estos productos.
En Las fincas casi siempre se encuentran productos Tóxicos (PPC), Corrosivos (ácidos y cáusticos), combustibles e inflamables y Oxidantes (hipoclorito, nitratos). Por ello se sugiere seguir el procedimiento para almacenamiento de fertilizantes y otros.
Nota: La información anterior se proporciona a manera de orientación. Está basada en fuentes consideradas veraces, y acatarla o no depende exclusivamente del usuario. El autor no se hace responsable por las consecuencias derivadas de la aplicación de estas recomendaciones.
Espere la segunda parte de este documento en la siguiente edición.