Existe una preocupación creciente a nivel global y en todos los sectores de la sociedad sobre el efecto que generará la Cuarta Revolución Industrial (convergencia de las tecnologías digitales, físicas y biológicas) en las empresas, los trabajadores y la dinámica del mercado laboral. Este efecto es generado por la velocidad de los cambios en los fenómenos y variables de esta revolución asociados al medio ambiente, la sociedad y la tecnología.

Debido a estos fenómenos, encontramos diferentes puntos de vista sobre las transformaciones que sufrirán los mercados laborales, que expresan pérdidas y ganancias de puestos de trabajo, oficios y tareas, y desaparición y nacimiento de sectores económicos e industriales.

Además de esto, la transformación del ser humano en su esencia, en sus habilidades, los dilemas éticos acarreados por las diferentes variables, y los cambios económicos, políticos, sociales, tecnológicos y ambientales, generarán grandes impactos. Estos demandarán la necesidad de que gobiernos, empresas y personas, realicen acciones encaminadas a enfrentar los grandes retos para la sostenibilidad del ser humano y del mundo.

Es a partir de allí que identificamos la necesidad de que todas personas monitoreen los entornos laborales y trabajadores futuros, con el fin de tener la posibilidad de prepararse hoy y ser relevantes y sostenibles en el futuro.